Acaba de aparecer el nuevo número (12) de la revista La Palanca (verano, 2009), dirigida por Diego José y Pablo Mayans e ilustrada en esta ocasión por Mariana Magdaleno. Incluye, entre otros textos de mayor interés, mi relato «La hija», que a su vez forma parte del volumen Habla de lo que sabes, que tampoco ha de tardar mucho.
Aquí unos párrafos:
Cuando, impaciente, toma el taxi, llega a sus oídos el tronido tumultuoso como una hacha densa por el aire.
—¡Verga! —grita el conductor. Es un hombre de cincuenta años, calvo, robusto y de cara grande—. ¡Qué fue eso!
—¡Maneje! Tengo prisa...
El taxista duda. Tiene la mano en la llave a punto de encender el motor, gente corre hacia las salas del aeropuerto —la voz en el asiento sin embargo insiste:
—¡Vamos, caramba! Algún percance de mierda. Conduzca...
El hombre pone en marcha la máquina. El escritor cierra los ojos. Las arrugas se le forman en el rostro como grietas de arena (arroyos secos). Tiene 53 años. Una hija de 28. Y ahora congoja: un animal muerto en la laringe.
Toman Bulevar Puerto Aéreo. El taxista prende el radio y las noticias llegan como en un acoso de libélulas incendiándole el oído.
—¡De no creerse! El vuelo México-Londres, de British Airways, explotó antes de siquiera despegar del Aeropuerto de la Ciudad...
El estallido: quemazón ahora en el estómago.
—¡Verga! —grita el conductor. Es un hombre de cincuenta años, calvo, robusto y de cara grande—. ¡Qué fue eso!
—¡Maneje! Tengo prisa...
El taxista duda. Tiene la mano en la llave a punto de encender el motor, gente corre hacia las salas del aeropuerto —la voz en el asiento sin embargo insiste:
—¡Vamos, caramba! Algún percance de mierda. Conduzca...
El hombre pone en marcha la máquina. El escritor cierra los ojos. Las arrugas se le forman en el rostro como grietas de arena (arroyos secos). Tiene 53 años. Una hija de 28. Y ahora congoja: un animal muerto en la laringe.
Toman Bulevar Puerto Aéreo. El taxista prende el radio y las noticias llegan como en un acoso de libélulas incendiándole el oído.
—¡De no creerse! El vuelo México-Londres, de British Airways, explotó antes de siquiera despegar del Aeropuerto de la Ciudad...
El estallido: quemazón ahora en el estómago.