Aquí, en Culiacán. (Allá, en otro orden de emociones: ¿por qué matar la perra al pobre perro? Éste no es un poeta valiente, nunca lo ha sido ni fingido. ¿Por qué tanta saña drástica este viernes?)
(Dándole la (pen)última revisión a Habla de lo que sabes.)