Bitácora de Geney Beltrán [χe’nɛi bel’tɾan], escritor mexicano (Tamazula, Durango, 1976).
viernes, septiembre 30, 2011
Otra conversación sobre la crítica literaria
Al lado de Jorge Solís Arenazas y Eduardo Huchín Sosa, participaré en la mesa de discusión Ruda por naturaleza: la crítica literaria en nuestros días, en el Centro de Creación Literaria Xavier Villaurrutia de la ciudad de México, el martes 4 próximo, a las 19:00 horas.
miércoles, septiembre 28, 2011
martes, septiembre 27, 2011
lunes, septiembre 26, 2011
domingo, septiembre 25, 2011
jueves, septiembre 22, 2011
21 de septiembre de 1991
Ayer se cumplieron 20 años de la muerte de mi padre. No lo recordé. Anduve intranquilo todo el día, desde que fui por mi hijo a su escuela, y comimos juntos con mi amigo Horacio en el Doña Maclovia, luego cuando me despedí de mi hija y de Nadia, y más aún al ir rumbo al aeropuerto, tomar el avión, llegar a Mazatlán: recordé, sí, el temor de morir en un avionazo, como siempre lo siento. Y a mi padre no lo recordé: formas que inventa uno para seguir comiendo de la culpa.
martes, septiembre 20, 2011
En Mazatlán, Sinaloa
Participaré
en el Festival de la Juventud Sinaloa 2011, en Mazatlán, Sinaloa, este jueves
22 a las 10 de la mañana, con la charla Narrativa joven, en el Museo de Arte de
Mazatlán.
viernes, septiembre 16, 2011
Comentario sobre Cartas ajenas
Miguel Ángel Hernández Acosta, autor de la novela Hijo de hombre, escribe un comentario crítico sobre mi libro Cartas ajenas en Suplemento de Libros.
Aquí los dos párrafos finales:
Esta primera novela muestra un compromiso con el español y si bien la historia avanza de manera clara (pues nunca se prioriza el lenguaje sobre la historia, ni viceversa), nos muestra a un narrador a quien le gusta jugar y arriesgarse en el momento de contar. A veces lo logra con mayor acierto, pero las ocasiones que no lo consigue logra al menos (y eso ya es decir mucho) una prosa clara y eficiente. Muestra de esto es una de las últimas escenas donde Mariolario contundente desvaría: “Llevaremos un mensaje. ¿Me están entendiendo? Una imagen de lo que pronto viene. Es una quimera, un incendio viable: una sola hoja con las palabras de los hartos, los vencidos, los de la indignidad forzada por tanta injusticia como arena en su boca”.
Cartas ajenas… es un libro difícil de seguir, pues busca un lector atento, quien al final verá recompensados sus esfuerzos; es una novela que requiere un doble esfuerzo, pero también, y este lo considero su mayor logro, es un regreso a la literatura comprometida consigo misma, que va más allá de la historia y que por lo mismo nos muestra a unos personajes, a un narrador y al escritor tras la pluma. Cumple con aquello que decía Pedro F. Miret: “El arte no es un filete que se puede pedir ‘término medio’ o ‘bien cocido’ según el gusto del cliente. Hay que dar libertad al cocinero y estar preparados a que nos lo pueda servir quemado algunas veces” y este filete está casi en su punto, pero nos muestra a un cocinero experimentado, quien sabe qué es lo que busca: el lenguaje como gran potenciador de mundos ficticios.
Aquí los dos párrafos finales:
Esta primera novela muestra un compromiso con el español y si bien la historia avanza de manera clara (pues nunca se prioriza el lenguaje sobre la historia, ni viceversa), nos muestra a un narrador a quien le gusta jugar y arriesgarse en el momento de contar. A veces lo logra con mayor acierto, pero las ocasiones que no lo consigue logra al menos (y eso ya es decir mucho) una prosa clara y eficiente. Muestra de esto es una de las últimas escenas donde Mariolario contundente desvaría: “Llevaremos un mensaje. ¿Me están entendiendo? Una imagen de lo que pronto viene. Es una quimera, un incendio viable: una sola hoja con las palabras de los hartos, los vencidos, los de la indignidad forzada por tanta injusticia como arena en su boca”.
Cartas ajenas… es un libro difícil de seguir, pues busca un lector atento, quien al final verá recompensados sus esfuerzos; es una novela que requiere un doble esfuerzo, pero también, y este lo considero su mayor logro, es un regreso a la literatura comprometida consigo misma, que va más allá de la historia y que por lo mismo nos muestra a unos personajes, a un narrador y al escritor tras la pluma. Cumple con aquello que decía Pedro F. Miret: “El arte no es un filete que se puede pedir ‘término medio’ o ‘bien cocido’ según el gusto del cliente. Hay que dar libertad al cocinero y estar preparados a que nos lo pueda servir quemado algunas veces” y este filete está casi en su punto, pero nos muestra a un cocinero experimentado, quien sabe qué es lo que busca: el lenguaje como gran potenciador de mundos ficticios.
lunes, septiembre 12, 2011
Literatura de primera línea
Eduardo Huchín Sosa publica el texto crítico "Más allá de la sordidez", sobre la novela Por el lado salvaje, de Nadia Villafuerte, en el número de septiembre de la revista Letras Libres.
Aquí adelanto dos breves fragmentos:
A pesar de su predilección por los escenarios hostiles del mundo, por los detalles corporales o las declaraciones alarmantes, la autora no se detiene en los hechos, sino abunda en los infiernos interiores, en aquello que los personajes tienen que decir sobre los hechos. El resultado no es otro que literatura de primera línea. (...)
La chiapaneca apuesta por eludir los tópicos a través de la introspección psicológica y la reflexión sobre la confiabilidad de los retratos, sobre el valor de lo narrable.
Aquí adelanto dos breves fragmentos:
A pesar de su predilección por los escenarios hostiles del mundo, por los detalles corporales o las declaraciones alarmantes, la autora no se detiene en los hechos, sino abunda en los infiernos interiores, en aquello que los personajes tienen que decir sobre los hechos. El resultado no es otro que literatura de primera línea. (...)
La chiapaneca apuesta por eludir los tópicos a través de la introspección psicológica y la reflexión sobre la confiabilidad de los retratos, sobre el valor de lo narrable.
sábado, septiembre 10, 2011
jueves, septiembre 08, 2011
Naturaleza muerta
La revista virtual Bonsái, literatura mínima publica en su número 3 el texto "Naturaleza muerta", de Nadia Villafuerte.
miércoles, septiembre 07, 2011
CLVIII
Vaya forma infalible que ha encontrado nuestro tiempo para domar al rebelde, para callar al indómito: el éxito.
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